PROCESO DE CRECIMIENTO EN PSICOTERAPIA

El proceso de crecimiento mediante la psicoterapia se desarrolla como un camino de autoconocimiento, transformación y mejora personal que sigue varias etapas fundamentales:

• Toma de conciencia: La persona inicia un proceso de autoreflexión para conocerse mejor, identificar sus pensamientos, emociones, creencias limitantes y patrones de comportamiento que afectan su vida.

  
  

• Desafío y confrontación: Con el acompañamiento del terapeuta, la persona enfrenta sus miedos, bloqueos, inseguridades y distorsiones cognitivas para cuestionar las creencias que la paralizan o generan malestar.

  
  

• Aprendizaje y adquisición de habilidades: A partir de este trabajo interno se desarrollan nuevas formas de pensar, sentir y actuar. Se fortalecen recursos personales como la autoestima, la inteligencia emocional, la asertividad y la autonomía.

  
  

• Aceptación y reconciliación consigo mismo: Se fomenta la aceptación de todas las partes del yo, incluyendo las consideradas negativas, lo que facilita una mayor integración interna y bienestar emocional.

  
  

• Cambio estructural y crecimiento profundo: El crecimiento personal implica una transformación interna que se refleja en cambios sostenidos en la forma de relacionarse con uno mismo y con los demás, buscando mayor plenitud, sentido y felicidad.

  
  

• Empoderamiento y autorrealización: La psicoterapia ayuda a la persona a tomar decisiones libres, comprometidas consigo misma, para desarrollar su máximo potencial y sentirse más satisfecha y equilibrada.

  
  

En definitiva, la psicoterapia impulsa un crecimiento progresivo que no solo busca resolver problemas o síntomas, sino promover un desarrollo integral del individuo para que alcance mayor bienestar, autoconocimiento y realización persona